27 de diciembre de 2008

Educación I. Colegio


Hola a todos, como estáis? Este es el primer post de tres que voy a hacer sobre mi vida escolar. El primero es sobre el primer colegio en el que estuve, el segundo sobre el segundo y el tercero sobre la universidad.

De mi primer colegio, en el que estuve hasta 2º ESO, se pueden decir muchas cosas, pero esto va a rasgos generales. Era, y supongo que seguirá siéndolo, un colegio laico, en el que desde pequeño se podía elegir cursar o no religión. A mi nunca me ha importado estudiar religión, no creo en Dios, y no por eso discrimino a la gente que cree en Él, porque sino estaríamos bueno… Aunque no creyera, los años que estuve en el colegio curse la asignatura de religión, principalmente por obligación materna. De ese colegio tengo tanto buenos recuerdos, lo bien que me lo pasaba en las acampadas, del viaje a Barcelona y de mis primeras y poco fructíferas relaciones con la música… pero también tengo malos recuerdos, y todos ellos eclipsan a los buenos.

Cualquier persona que haya pasado por mi situación lo entenderá. Es muy difícil perder un padre, sea por el motivo que sea, y es más difícil volver a la normalidad. Y más cuando en el colegio tienes que responder preguntas tipo, ¿cuantos año tiene tu padre? ¿De que trabaja tu padre? O la típica redacción sobre los padres. Y que por eso todo el mundo te trate de una forma diferente no ayuda. Luego el problema estaba a la hora de rellenar papeles, al preguntar que tenías que poner o no poner…

Otra de las cosas de las que me di cuenta en ese colegio, fue mi homosexualidad. Creo que desde los 10 años sospechaba sobre mi orientación, pero el cuando empecé la ESO la cosa fue segura, no todo el mundo se fijaba en lo que yo me fijaba en los vestuarios, no? Fue cuando me di cuenta de que era diferente a los demás, me gustaban los chicos.

Los dos primeros años de la ESO los pase muy mal. A parte de que no me gustara el fútbol, de que me gustara leer, y pasara de las conversaciones sobre lo guapas que eran las chicas, (y mas cosas, claro…), estaba el hecho de que había un chico que me gustaba. Obviamente nunca le dije nada y en parte me alegro de haberlo hecho, porque si además demostraba lo alguno pensaba, lo hubiera llevado peor. Sufrí lo que ahora se llama bullying, no es que fuera un acoso físico, no me pegaban todos los días en el colegio, era algo más psicológico y verbal, aunque algún golpe cayera de vez en cuando. Nunca he tenido muchos amigos, pero se dedicaron a marginarme de los pocos que tenía y a excluirme del grupo. A intimidarme y a amenazarme. Cosa que me ha marcado mucho emocionalmente. Me volví un desconfiado y más introvertido de lo que ya era, y fue cuando empecé a mostrarme frío. Si no sabían como me sentía les costaría más fastidiarme. Lo pase muy mal, y peor lo pase cuando el chico que me gustaba empezó a intimidarme. Y como suele pasar, me daba vergüenza contar lo que me pasaba. Mi madre no se enteró hasta el último momento, cuando no podía más y le pedí que me cambiara de colegio…

De ese colegio lo único con lo que me fui, fue con la amistad de Marta, la única que ayudo, cuando todos me daban de lado.



Petons
See You Soon

PD. Sigue mañana, en el nuevo colegio…

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